La noticia corrió como pan caliente en aquel pequeño pueblo llamado Sensuntepeque .La familia Velasco Barrera celebrarian las bodas de oro del matrimonio conformado por don Gerardo Velasco y doña Eugenia Barrera . El lugar de tal celebración sería la sala Garibay Gutierrez . Los organizadores de esta memorable fecha eran sus 12 hijos quienes crecieron tomando el ejemplo de sus progenitores,sus nombres y orden de venir a este mundo:
Lidia,Blanca.Benjamin, Adela, Alfredo ,Belarmino, Marina,Ramiro y Manuel(gemelos), Medardo (fallecido) Emelina y José (quien escribe esta nota ).
Se inició con una misa en la iglesia Santa Bárbara donde estuvo presente la extensa familia é invitados especiales. En un lugar preferencial estaban los nuevos novios, don Gerardo y doña Eugenia, lucían muy elegantes,como queriendo demostrar que el tiempo no había pasado en vano,habian convivido por 50 años ,donde pudo faltar cualquier cosa, menos amor. Doña Eugenia con su traje de novia y don gerardo vestido muy elegante,acaparaban las miradas y los nietos buscaban el mejor ángulo para las fotos y videos . Terminada la misa,el destido era el lugar de celebración .
Toda aquella celebración fue muy bien planificada . Los sobrinos y sobrinas se habían organizado para atender a los presentes. Debo decir que todo salió perfecto, donde nunca faltó comida y bebida y la música excelente, que hizo que todo mundo bailara .
En un momento se habló de los orígenes de los protagonistas .Trataré de trasladar un poco lo que ahí se narró .
Gerardo era un joven de unos 21 años y Eugenia una bella chica de 19 que se conocieron de una forma poco usual. Sucedió que cada mes viajaban los padres de Eugenia de San Marcos hasta Sensuntepeque, usando como medio de transporte el caballo .Gerardo desde su casa en el cantón Chunte veía pasar aquellos viajeros y desde que vio a Eugenia quedó prendado de su belleza y sucedió que don Sotero y doña Felipa, padres de Eugenia, decidieron pedir un vaso de agua en aquella casa. Los padres de Gerardo, don Fernando y doña María Estanislao, gente muy amable les invitaron a pasar un momento a descansar pues era hora de almuerzo. Como era costumbre en esa época los viajeros llevaban su comida,pues debemos decir que el recorrido era largo por falta de carreteras. Los viajeros aprovecharon para comer en aquella casa y mientras tanto se conversaba de todo entre aquellas familias,siendo un punto común el aspecto católico,pues debo decir que vivian el catolicismo en aquellos cantones . Después de ese dia nacía una gran amistad entre ambas familias,y me imagino cupido empezaba a trabajar entre los jóvenes Gerardo y Eugenia .
El tiempo pasó .No se sabe si fue Gerardo el que se armó de valor y se declaró a Eugenia o fue la decisión de los padres que prácticamente dieron el banderillazo de salida para los nuevos novios .Lo cierto es que un dia tanto Gerardo como Eugenia se comprometieron como nuevios y mas tardes como esposos .
La vida la hizo aquella pareja en San Marcos, ocupándose Gerardo de trabajar la agricultura y sacar junto a Eugenia a sus 12 hijos, dándoles el ejemplo siempre y hacerlos gente de bien .
Luego de contar esa vivencia familiar,les invito a girar la vista y ver la foto en la parte superior de esta nota . Vemos una pareja viviendo su tercera edad . El título de mi nota dice “No debemos temer a la vejez". Al contrario, sintámonos dichosos por tener larga vida y cosechar lo que pudimos hacer en nuestra vida productiva .
No debemos aislarlos como gente que ya no sirve para nada . Al contrario ,debemos involucranos en actividades de la comunidad como iglesias .Si hay una directiva en la colonia tratemos de dar nuestro aporte .Hay ejemplos de cómo en otros paises los ancianos participan de actividades recreativas en parques .Si como producto de su esfuerzo logró tener un lotecito,trate de sembrar arbolitos a modo de pasar entretenido .
Yo trato de vivir esos temas con humor,ahora les cuento : Soy amante de entrar a los chats,como ud..sabe que ahí ud..puede decir lo que quiera y no necesita comprobación,en mi caso les digo lo siguiente : Soy un señor de 90 años que vivo en un asilo .Tengo una directora de 55 años con variantes estados de ánimo por la menopausia . Las mujeres que ahí viven tienen entre 70 y 85 años y algunas son muy coquetas. Mis compañeros se la pasan todo el dia jugando dominó y se burlan de mi persona diciéndome…No perdás el tiempo en esos chats…a tus 90 años nunca encontrarás novia . Debo decir que como lo que digo lo hago en forma sería muchas mujeres creen que en verdad vivo en un asilo ajajjajaj .
Para terminar,si ud.que me lee es político,digamos diputado, haga algo a nivel de leyes por la gente de la tercera edad .No es justo que esa gente que aportó en su momento, ahora tenga que ser un malabarista para que le alcance su pequeña pensión . Si ud.es joven todavía,trate de ahorrar para cuando lo toque retirarse tenga un dinerito extra .
Amigas y amigos, debo terminar la presente nota,diciéndoles una vez más que quien llega a la tercera edad debe sentirse dichoso y disfrutarla a plenitud. Gracias por el tiempo dedicado a la lectura de esta nota.Le recuerdo que no soy escritor,ni periodista.Solo soy un humilde hombre que escribe con el alma .
Agradeceré cualquier comentario, en espacio reservado ó a mi correo .
Desde mi pais El Salvador, un feliz fin de semana para todas y todos .
JOSÉ VELASCO
chevelasco@hotmail.com
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