Albertina muy emocionada por tener el permiso de su padre, para ser la novia de Macario, a cada rato lo besaba .Se detuvieron bajo la sombra de un arbol de mango y se juraron amor eterno.Aquella escena estaba llena de mucho romanticismo. Albertina estaba sentada sobre una piedra y recostada sobre el grueso mango. Macario se mantenía tirado en el suelo y recostado de espaldas sobre las piernas de aquella bella mujer.El pelo largo de Albertina rozaban el rostro de su novio Macario.Todo era felicidad en aquella joven pareja.
Pasada una hora, doña Luisa llamó a Albertina pues necesitaba la ayudara para colar el suero de donde hacian el requesón.Macario le dijo: Albertina debo irme a mi casa,me voy muy feliz pues tu padre nos permitió ya no vernos a escondidas.Albertina le apretó la mano y le susurró al oido, estaba nerviosa por la reacción de mi padre.Nos vemos el domingo en la capilla, tu sabes que me toca vender el café con pan dulce.Se despieron dándose un prologando beso.
Macario solo se despidió de doña Luisa. Quien le tenia un pequeño recipiente plástico con 6 nuégados y otro con chilate.Le lleva a su mamá le dijo.Espero pronto conocerla. Macario Agradeció el regalo de su suegra y dandole un abrazo le repitió lo feliz que se sentía por tener el permiso y ser el novio de Albertina.
No pudo despedirse de don Armando pues habia salido a enchiquerar(separar de las vacas de ordeño) a los terneros.
Al momento de subirse al caballo vió que el perro negro que lo mordió en su pierna lo observaba y movia la cola, como diciendole no temas ahora eres parte de la familia.
La distancia entre la casa de los novios era de unos 8 kilómetros.Macario hizo el recorrido a su casa sobre aquel caballo que era la envidia de muchos, por su carrera y tamaño.Mientras cabalgaba pensaba en Albertina .
Cuando faltaba un kilómetro para llegar a su casa,se encontró con Pablo quien fuera compañero en sexto grado y que ahora ayudaba a su padre en una pequeña granja de pollos de engorde.Pablo en su momento tambien habia pretendido ser el novio de la bella Albertina .Se saludaron y como imaginando que venia de casa de Albertina fue breve y solo le dijo,no olvides que tenemos juego el domingo. Claro le dijo Macario hay que ganarles a los de la hacienda .Macario por su estatura y capacidad era el portero obligado del cantón La Montañita.
Macario llegó a su casa. Vivia junto a sus padres don Anselmo y doña Reymunda .Era hijo único. La casa era de adobe
Macario entregó a su madre el presente que le mandaba doña Luisa.Ella con una sonrisa recibió la bolsa que contenia los recipientes con nuégados y el chilate y le dijo: Saliste con la tuya.Esa muchacha siempre me gustó para Ti.Al fondo don Anselmo que casi no estaba enterado de los pasos de su hijo Macario, preguntó,y ella es hija de quien? .Luego que le explicaran quienes eran los padres de Albertina, don Anselmo continuó afilando un cuchillo que utilizaba para capar los toros.
Se llegó el domingo.Tanto Albertina como Macario se encontraron en la capilla.Albertina lucía radiante.Macario se puso su ropa del domingo,se veia muy presentable.Los clientes que disfrutaban del pan con café se sorprendieron al ver aquella joven pareja besandose al momento que se saludaban. Hay que decir que en La Montañita casi todos se conocian,pero no sabian de la relación de aquellos novios.El mayordomo de aquella capilla a manera de broma les dijo:Por lo que veo pronto habrá boda .Todos los presentes se pusieron a reir. Albertina continuó sirviendo el café con pan y Macario se dirigió con un amigo hacia la cancha de fútbol atrás de la capilla, donde se enfrentarian al equipo de la hacienda.
(Continuará)
Amigas y amigos,gracias por leer la segunda parte de mi cuento.Espero que todas y todos tengan un feliz dia.Les recuerdo que no soy Escritor ni Periodista,slo soy un humilde hombre que escribe con el alma.
JOSÉ VELASCO
chevelasco@hotmail.com
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